El Bótox contiene Toxina Botulínica, una proteína producida por la bacteria Clostridium botulinum. Al ser una neurotoxina, cuando se aplica de manera controlada a través de inyecciones administradas únicamente en clínicas de botox autorizadas, se bloquea el movimiento excesivo de los músculos. Este bloqueo ocasionado por la neurotoxina es lo que suaviza las arrugas y las líneas finas.

En una sola palabra, mucho. No existe una fórmula para determinar la cantidad de líneas y arrugas profundas que el botox puede prevenir a lo largo de la vida de una persona. Lo que sí sabemos: la aplicación constante de botox preventivo asegura una apariencia con muchas menos líneas a largo plazo. Así de efectivo es el tratamiento.

La hinchazón es una respuesta común de la piel, aunque es posible que ni siquiera lo notes. Los puntos de inyección tienden a ser muy finos (aproximadamente del tamaño de una peca) y dejan de notarse en 30 minutos.

Ejercicio: puedes disfrutar con seguridad de cualquier ejercicio antes del tratamiento. Sin embargo, después deberás evitar el ejercicio durante aproximadamente 24 horas y no acostarte durante 4 horas. Esto evita que el tratamiento migre a donde no debería.

Alcohol: para una recuperación rápida con menos posibilidades de sufrir hematomas, no recomendamos consumir alcohol 12 horas antes del tratamiento con Botox y esperar al menos 4 horas después del tratamiento.

La dosificación es en gran medida una ciencia y altamente individualizada. Para quienes reciben botox, la cantidad óptima para la prevención de arrugas (lo que llamamos “tu dosis ideal”) suaviza las líneas existentes y deja espacio para las expresiones que hacen que tu apariencia sea única.

No, el Botox no cambia el perfil de tu rostro! Muchas veces los cambios en el perfil del rostro son el resultado de rellenos de ácido hialurónico. Es importante que nos informes si tienes alguna alergia, enfermedades clínicas, problemas de nervios o músculos, y cualquier medicamento que estés tomando actualmente. 

Es un error muy común pensar que tus arrugas volverán a aparecer aún más fuertes si decides aplicarte botox y luego dejar de hacerlo. La verdad es que es más parecido a tomar vitaminas: es bueno empezar pronto y tus arrugas serán menos pronunciadas a comparación de si nunca lo hubieras hecho.

Si bien no existe una respuesta correcta, recomendamos tratar las líneas de expresión en el momento en que comienzas a notarlas para una mejor prevención a largo plazo. Para la mayoría, esto será entre los 25 y los 30 años, aunque la complexión de cada persona es diferente.